
TRADICIÓN, COCINA MURCIANA Y MANO CON ALMA
Una mujer apasionada que apuesta por el buen hacer tradicional y por la honestidad de los sabores. Se licencia en Derecho aunque nunca ejerce su profesión. En el momento en el que descubre su pasión por la cocina se entrega de lleno a ella y son sus hijos los que proponen que cree un perfil público donde compartir sus recetas, además publica dos libros de cocina (Dulces todo el año y En casa de Teresa Vivancos).
Hace un año y medio su hijo mediano, Álvaro (cofundador del obrador) , le habla de unas tartas de queso que le habían cautivado y le da el empujoncito que quizás estaba esperando, incluso sin saberlo. para dar un paso más y abrir su propio obrador de tartas de queso. No es una tarta de queso más, son meses de trabajo buscando los ingredientes, conociendo pequeños proveedores y buscando las medidas y el tiempo perfecto de horneado.
Podría decirse que la familia es el ingrediente principal de Teresa, el que le aporta las ganas de superar nuevos retos, la seguridad en sí misma y el cariño con el que cocina.

VANGUARDIA, CABEZA Y ALMA ESTRATÉGICA
De trato abierto y gran comunicador, combina simpatía y un punto competitivo que le han acompañado siempre. Aunque su vida profesional estuvo ligada al deporte —concretamente al fútbol—, desde pequeño fue cultivando, casi sin saberlo, su pasión por la gastronomía: en la cocina de su madre y su abuela, en los viajes familiares y en cada nueva mesa que descubría. Los postres han sido siempre su debilidad, ese final que nunca falta tras una buena comida. Y entre todos, uno ocupa un lugar especial: la tarta de queso.